Balas de paramilitares, con probable complicidad del Estado, acabaron el 26 de abril de 1990 con la vida de Carlos Pizarro, uno de los dirigentes históricos de la guerrilla colombiana que, tras el abandono de la lucha armada, participaba en la campaña electoral como candidato presidencial. Veinte años después, la procuraduría reabrió el caso para averiguar quién ordenó el crimen....
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