Se trata de fragmentos de dos trabajos documentales, uno realizado por la Comisión Intereclesial Justicia y Paz y el otro elaborado por Morris Producciones (Contravía) en colaboración con diversos colectivos y ong's colombianos. Versan sobre el desplazamiento forzado de campesinos que huyeron de matanzas paramilitares. Hoy intentan regresar a sus tierras, pero las encuentran sembradas de Palma Africana y ocupadas por empresas vinculadas al paramilitarismo. Varios colectivos colombianos denuncian que la mencionada apropiación está en proceso de legalización por el INCODER (Instituto Colombiano de Desarrollo Rural). Existen aproximadamente 3 millones de desplazados forzosos. Las tierras reapropiadas (algunos colectivos hablan de unos 4 millones de Ha.) están comprometidas en grandes proyectos de infraestructura o de tipo viario y también en el monocultivo de la palma africana (la cual se emplea en la producción de agrodiesel), como se muestra en este caso.
Por otro lado, queremos solidarizarnos con Hollman Morris, productor y director del programa de televisión CONTRAVÍA. En horas de la noche del 27 de septiembre, el periodista recibió una nueva amenaza en su correo electrónico personal. El mensaje contenía un archivo adjunto en el cual se encontraba una fotografía del periodista tachada con una X. La amenaza fue enviada por medio de un correo electrónico de un denominado ‘Frente Patriótico Colombiano’, y contenía además, la siguiente frase: “Por sapo, por guerrillero, ya casi”. Morris se ha visto obligado a abandonar el país para salvaguardar su vida, como muchos otros comunicadores independientes en Colombia.
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